MASCOTAS.
Nunca hemos tenido mascotas en casa.
¡No me gustan!
Porque me parece que los que las tienen se las dan de ser muy buenos.
Y yo no soy tan bueno.
Porque se proyectan en animales, a los que dedican todo su amor.
Como batiendo un record afectivo.
Habiendo, como hay, tanto despliegue de desamor entre los humanos, esmerarse de ese modo con los bichos, francamente, me parece un disparate. Me contaban que cuando el terremoto de Guatemala vieron en el periódico un anuncio de alguien desolado reclamando ayuda para encontrar su perrito...
Y también los hay que no me parece que sean tan buenos.
Cerca de casa hay un parquecillo para sacar al perro y a veces veo dueños ejerciendo su despotismo con sus animales ¡SIT! ¡SIT! . Como si disfrutaran sintiéndose superior a su cuadrúpedo.
Y es que me parece que, quieras o no, a las mascotas las humillas. Y a mí la humillación me repugna ¡no lo puedo remediar!
Aparte de que esa es una afición muy esclava...
Me enteré de que hay unas extravagantes mascotas que son los ositos de agua, o tardígrados.
Son animales microscópicos muy interesantes y creo que no hay que comprarlos siquiera porque salen espontáneamente en condiciones que te dicen cómo.
Lo malo es que para ver estas mascotas hay que valerse de un microscopio ¡No llego a tanto!
Pero desdiciéndome de mis reservas expresadas al principio ¡Ahora tengo una mascota!
Es una araña, que ya la he presentado en Facebook.
Me la encontré en un rinconcillo de mi "taller de Gran Torino".
No tengo que hacer nada por ella ¡Desde luego no la tengo que sacar a mear!
Ni de paseo,
ni nada.
Ni le tengo que dar de comer ¡ella se apaña! El otro día la vi tratando de cazar una mariposa más o menos de su talla ¡Y la lidió con maestría! Pero se le escapó...
Camina con destreza sobre su red que está un poco descangallada. De lo que en parte soy culpable, porque está junto al mando para subir y bajar la persiana y al manipularlo siento como me engancho en su tela y supongo que la desgarre...
Y sobre todo esa afición tiene una cualidad muy apreciable:
¡Es gratis!
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