Salterio Online

Bienvenidos al blog de Tomás Garcia Asensio también conocido como Saltés. Los que me conocen sabrán de que va esto, y los que no, lo irán descubriendo...

domingo, 11 de septiembre de 2011

El círculo vicioso.

LA HIDRA ALIENADA.


Pero ¿qué pasa en Europa que hay países como Grecia que están en la ruina, Portugal e Irlanda casi, Italia así, así y España al borde del abismo?

Pasa que no es un estado, como Los Estados Unidos, o Rusia, o India, o China que tienen dimensiones comparables.

Es una acumulación de estados con leyes supraestatales y sin un verdadero gobierno por encima de los gobiernos de los diversos estados, y con una moneda común a casi todos, con lo que eso pesa, que no pivota sobre un firme eje común.

Y ¿por qué?

Porque los mapas políticos se suelen trazar generalmente tras las guerras, y están dibujados con sangre. Y los que los dibujan son los ganadores y los perdedores no pintan nada.
¿Y qué pasó con Europa?

Que Alemania, con Italia como comparsa, se metió en guerra con la mayoría de los países de Europa, e iba ganando, porque muchos perdieron y otros no podían ganar. Cuando la cosa se iba decidiendo intervino USA. De modo que verdaderamente ganaron los americanos y los rusos. Los ingleses, que no perdieron, pero tampoco ganaron, se tiraron el moco de haber ganado y se prestaron al paripé de ocultar que el vencedor no era europeo. Y los franceses que pura y llanamente habían perdido se colaron en el carro de la victoria para redondear el camuflaje.

Al final USA y Rusia jugaron la supercopa en un partido llamado “guerra fría”, que ganaron los americanos. España no entró en la guerra, pero como se dejó ocupar militarmente por los americanos perdió su particular “guerra fría”.

El caso es que los americanos se quedaron con todo. Y pusieron a toda Europa bajo arresto domiciliario ¡sin autodefensa! con sus ejércitos metidos en la OTAN bajo mando militar americano.
Obviamente eso no es un estado, sino una entidad multicéfala, una indefensa hidra expuesta a los mayores desastres.

¡Pues eso es lo que hay, y no es de extrañar que pase lo que pasa!







domingo, 4 de septiembre de 2011

Un tiempo bien aprovechado.

Este post nº 245 del Salterio se lo dedico a Nico y a Jorge.



CAMPAMENTO DE VERANO.

Ya sé que no somos originales, porque estar con los nietos cuando sus padres curran es corriente. Pero he de confesar que hasta que no he visto en el telepeñazo un espantoso reportaje sobre el tema no he caido en la cuenta. Tan negativamente me impactó que me planteé no poner esta entrada. Pero bueno.

Supongo que a nuestros nietos les pasen lo que a todos ¡que son únicos! Yo podría jurar que lo son realmente ¡pero qué más da eso! El caso es que uno se llama Nico y tiene seis años y el otro Jorge y tiene cuatro. Al tener más vacaciones que sus padres en el diferencial se vienen de la mañana a la tarde de Campamento de Verano a casa. Es que nuestra casa es medio rural y se presta. En Julio estuvieron unas semanas y ahora en Septiembre estarán otras.

Nico hace un poco de inglés con su abuela y los dos dibujan un poco conmigo, a partir de historias que les cuento o ejemplos explicativos de procedimientos y técnicas como el relativo al genio de la botella que figura a continuación.




Ahora os muestro un dibujo de Nico del año pasado, que estuvo más aplicado al dibujo que este, del dinosaurio aquel que apareció por Cuenca o por ahí y que suponían jorobado



De Jorge os muestro un pirata de este año con dos garfios y dos patas de palo.


Alguna vez hacemos otras cosas, como quemar hojas secas con los rayos solares concentrados con una lupa, como puede verse en la siguiente foto. Eso les gusta mucho, y me dicen: "Tomás, vamos a poner el dispositivo", es decir la lupa sujeta con pinzas al recogedor de barrer.



Pero sobre todo juegan y "pierden el tiempo". Enseguida "empezarán a ganarlo" y se pasarán todo el año "ganándolo". No voy a negar que los maleduco. Hace unos días el pequeño le contaba a su tía Ana que su hermano había tenido hipo.

Y ¿qué pasó? dijo Ana.

Bebió con el baso del revés y se le quitó. Como dice Tomás: o le das un susto del carajo, o bebe con el vaso del revés.

Y parece que funcionó.

La verdad es que estamos encantados de disfrutar de tan buena compañía.