Salterio Online

Bienvenidos al blog de Tomás Garcia Asensio también conocido como Saltés. Los que me conocen sabrán de que va esto, y los que no, lo irán descubriendo...

domingo, 20 de agosto de 2023

En este mundo traidor...



¿EXISTE LA OBJETIVIDAD?

Hoy ha quedado claro, una vez más, que la objetividad no existe.

Se entiende que un hecho es objetivamente bueno cuando unánimemente se califica como bueno.

Y objetivamente malo cuando unánimemente se califica como malo.

¿NO?

Pues hoy que se ha disputado una final de un campeonato mundial de fútbol entre la selecciones nacionales de España e Inglaterra en resultado le debería parecer bien o mal a todo el mundo...

¡Pues no!

A toda la peña española le ha parecido muy bien.

Y a toda la peña inglesa le ha parecido muy mal.

Y yo me pregunto ¿qué ha sido de la objetividad?




sábado, 12 de agosto de 2023

Suculencias.

RAYA EN COLORAO

Hoy he cocinado yo.

Hice un guiso de raya con pimentón conocido como "raya en colorao". A diferencia de otros guisos de pescado "en amarillo", que llevan azafrán, condimento amarillo, papas, guisantes y a lo mejor más cosas, este lleva solo raya y condimentos, como el pimentón. Os paso la receta ¡Os vais a chupar los dedos!

Los ingredientes son: Peje raya, cebolla, ajos, perejil, laurel, pan, clavo, comino, el hígado de la raya, sal, vinagre y orégano.

La raya puede ser fresca o congelada. Lo primero ¡e indispensable! es escaldarla.

Por una razón principal: Los peces marinos tienen un problema ¡se secan! Porque el agua salada del mar es ávida de agua y succiona el agua de la sangre de los peces y palmarían si "no tomaran precauciones".

Los peces "de espina" reponen el agua dulce que el agua del mar les roba "procesando" agua salada , a la que le "extraen" la sal, que luego tiran al mar...

Pero los peces cartilaginosos, tiburones y rayas, de "diseño más antiguo", no saben hacer eso Y recurren a un procedimiento más guarripey: vierten sus orines en el caudal sanguíneo, con lo que aumentan la salinidad. Lo pueden hacer porque han discurrido la manera de no envenenarse con sus propios orines, cosa que otros no saben hacer...

¿No habéis notado que se consumen pocos tiburones? El cazón y poco más.

Mientras que tradicionalmente con esos pescados hacían tollos secándolos.

Lo que ocurre es que en la vida moderna no hay tollos...

Los tollos son carne de tiburón seca, con lo que se mataban dos pájaros de un tiro:

Se conservaba el pescado y sobre todo se oreaba. Desprendiendo los orines que lo impregnaban.

Si es que lo encontráis, hay que ponerlo en remojo toda la noche, luego se escurren bien, se secan con papel de cocina y se guisan del mismo modo que la raya.

Por la misma razón es indispensable escaldar la raya para cocinarla ¡para desprenderlas de los orines que contienen!

He visto cocineros en la tele guisando raya sin escaldar...¡Vivir para ver!

Bueno ¡procedamos!

Se corta la raya en trozos. Se pone agua a hervir y cuando hierve a borbotones se van metiendo los trozos de raya, con lo que baja la temperatura, por lo que se deja al fuego hasta alcanzar de nuevo la ebullición. Se sacan los trozos de pescado se ponen a escurrir y se le quita la piel.

Luego se pone el pescado en una cazuela.

Se fríe un par de rodajas de pan, y se come uno una de ellas, porque está muy buena.

En el mismo aceite se fríe la cebolla, los ajos, con cascarilla y todo, el perejil, el laurel, y un poco el hígado de la raya. Pero pudiera ocurrir que no hubiera hígado en la pescadería. En tal caso hay dos opciones: o no se pone hígado o se le pone una cucharada de paté, de cerdo o de lo que sea ¡es mejor que nada!. Se pone también clavo y comino, pero si no ¡no pasa nada! porque hoy se me olvidó y no lo eché de menos. Y en el último momento una cucharada de pimentón ¡pero que no se queme!

Con todo eso se hace el majado. Pero yo prefiero la batidora. En un vaso pongo los ajos sin los pellejos, la cebolla, el picatoste, el hígado (o el sucedáneo), el perejil, el pimentón, los cominos, los clavos, la sal y el aceite, y el agua que calcule que será necesario. Las hojas de laurel no las machaco, las echo enteras en la cazuela.

Se bate todo lo del vaso, se echa en la cazuela, se corrige de sal y de agua, de modo que no llegue a cubrir el pescado, y se hierve más bien poquito, cinco minutos o menos, y en cualquier caso se sacan pellisquitos de pescado y se van probando.

Ambas recetas, la de la raya y el tollo, son muy dignas de tener en cuenta.

¡Buen provecho!

 

martes, 8 de agosto de 2023

Sarna con gusto no pica.

LA FELICIDAD ANUAL

Yo me paso todo el año esperando los dos meses más felices: julio y agosto.

Porque hace calor ¡mucho calor!

Y mucha luz.

El 21 de junio es el día más feliz del año, porque a las 10 de la noche aún no es de noche.

Y el 21 de diciembre también es un día feliz, porque es el día de mi santo. Santo Tomás Apostol. Aunque los 30 días restantes son perfectamente desastrosos. Yo creo que han puesto las fiestas para evitar los suicidios colectivos.

Ese santo mío es el más empirista.

A pesar de ser el 21 de diciembre el día más corto del año, ya que antes de la 6 de la tarde ya es de noche, a mí me gusta por razones nominalistas. Un papa ocioso lo cambió al 3 de julio ¡pero los vascos pasaron, mantuvieron el 21 de diciembre! con la correspondiente tamborrada.

Santo Tomás Apostol es un santo muy chulo. era primo de Jesús. Y según Harold Bloom en "JESÚS y YAHVÉ los nombres divinos". Según este importante actor, Jesús no murió en la cruz. Dice que siendo Dios o Hijo de Dios, no me acuerdo muy bien de lo que dijo, no iba a ser tan tonto de dejarse morir en la cruz. Sino que se curó y se fue con su primo Tomás y con las familias de ambos, esposas e hijos, a la India (en Siria, que no es la India, pero ¡yo qué sé! está la tumba de Jesucristo) Si todo eso es verdad o mentira ¡yo cómo lo voy a saber! Ah! y Santo Tomás también es evangelista, su evangelio está en GOOGLE ¡lo podéis ver! y no es pseudo-biográfico como los otros, sino de sentencias, como el Tao te King.

Bueno, digo esto por no hacer de diciembre un perfecto valle de lágrimas... Lo que quiero resaltar es lo dicho, que desde el 21 de junio, julio y agosto forman la época del año en la que ¡soy totalmente feliz!

Con este calorazo, tan denostado por todos los medios. Y no me importa que me llamen negacionista, que aquí a todo el que rehúse meter su cerebro en la flanera lo insultan en esos medios que más que de información son de conformación.

Bueno ¡pues nada! Que aunque "en agosto frío en el rostro", no voy a ser tan gafe. Y voy a poner los cinco sentidos en disfrutar de este calorcito tan maravilloso...que hasta que llegue de nuevo nos va a tocar sufrir lo indecible...

Yo ¡es que lo veo así!