Salterio Online

Bienvenidos al blog de Tomás Garcia Asensio también conocido como Saltés. Los que me conocen sabrán de que va esto, y los que no, lo irán descubriendo...

miércoles, 19 de agosto de 2020

El rey bajo bastos.


ÁRNICA.

Tengo entendido que un abogado cuando  ve que le están dando demasiado caña a su defendido pide "árnica". O sea, un poco de cuartel. Sobre todo en las formas, aunque el fondo siempre resulta beneficiado.

Lo digo porque el "emérito" merece un poco de árnica, ya que se están aplicando con él con demasiado dureza.

Porque por aquí la presunción se pasa por el forro. Se dice, pero no se hace.

Y la presunción sirve para dos cosas:

Para esperar a que se confirme que haya culpa para sacar la estaca.

Y para ver, más o memos, la pena que le pudiera corresponder a esa culpa, evitando así una condena incondicional, que es lo que suele ocurrir.

El emérito tiene sus cosas... pero ¿quién no las tiene?

Pero que el apoyo de todo este circo sea la declaración de una cortesana recogida y divulgada por un policía corrupto ¡tiene bemoles!

Después de todo en el haber del emérito está haber sido la clave en la restauración de la democracia y su último servicio al país parece haber caído en saco roto. Porque su mediación parece haber sido decisiva para que el proyecto de AVE a la Meca se le adjudicara a España ¡mil millones! que son muchos millones.

Dicen que los gabachos se quedaron con tres palmos de narices...A ver si los decepcionados tienen algo que ver con esta lapidación tan generalizada a la que con tanto entusiasmo se está entregado el país.

Cuando las barbas de tu padre veas pelar...¡Cuidado! que se puede quedar sin herencia y sin corona.

Si aún no hay ni siquiera denuncia ¿Cómo es que se tiene que ir de casa y quedarse sin la pensión de jubilación? Y andar por ahí buscando cobijo ¡Y recibiendo reproches por no someterse! ¡Y por buscar un refugio sin pedigree democrático.

Aquí nos estamos equivocando mucho y muchos ¡Y los errores se pagan! Siempre se pagan. Y suelen pagar los justos por lo pecadores.

En mi anterior post me declaré republicano. 

http://salterio.blogspot.com/2020/08/ecuanimidad-democratica.html

Pero también dije que el que el régimen de nuestro país sea monárquico o republicano no es esencial. Que lo esencial es que la JEFATURA DE ESTADO tiene que ser de recibo. Y esta puede ser una monarquía o una república.

Está previsto que el jefe de estado no gobierne, que verdaderamente sea un árbitro. Y para tal fin tanto da rey como presidente. Pero si lo que hay es un rey, o un presidente, buenas ganas de formar una bronca.

Porque lo que parece que está ocurriendo es que los incondicionales de la república están aprovechando la grieta que han encontrado para hacer palanca y derribar la monarquía ¡Y eso es trampa!

¿Cómo se sale de esta?

Juzgando el caso, sentenciándolo debidamente y pagando a hacienda lo que corresponda.

Si como efecto de todo ello el emérito se queda sin blanca que se le restituya la pensión de jubilación. Que, como todo el mundo, se apañe con lo que tenga ¡Y se le deje en paz!

Y que no se aproveche la ocasión de que el Pisuerga pasa por Vayadolid para que un amiguete se dé el gusto de fardar de presidente de la república...

Que los escaladores olímpico aquí no faltan, y se las ingenian para trepar fuera de foco.

 

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