Salterio Online

Bienvenidos al blog de Tomás Garcia Asensio también conocido como Saltés. Los que me conocen sabrán de que va esto, y los que no, lo irán descubriendo...

lunes, 26 de julio de 2010

Trino.

Este post nº 178 del Salterio se lo dedico a Isa porque hace nada fué su cumple. ¡NO PUEDO ENTENDER QUE HAYA ATEOS ESTANDO SHIVA!



Shiva es la sacralización de un hecho esencial: que existe lo que existe y no puede dejar de existir. Y del hinduismo me encanta la idea de la reencarnación. Pero no creo que se reencarne uno entero en un gato entero o en una serpiente entera dependiendo de lo bueno o lo malo que se haya sido. Sino que parte de lo que uno era llegue a ser parte de serpiente, de gato, de silla o de burbuja de coca cola. Y sobre todo no puedo creer en el nirvana: que alguien se extinga total y absolutamente y no vuelva a reencarnarse parcialmente.

Es curioso que a los cristianos el desaparecer les jode. Y después de muerto se van al cielo, o al infierno, para pasarlo bien o mal según hayan sido buenos o malos en este valle de lágrimas ¡Pero felices o jodidos la permanencia la tienen garantizada!

Mientras que a los hinduistas lo que le mola es desaparecer. De modo que después de muertos vuelven a este mundo reencarnados en seres buenos o malos según hayan sido en vida. Y su máxima aspiración consiste en desaparecer absolutamente y fundirse en el ser del mundo sin conservar nada de su ego particular.

Aquí hay dos cosas: una la formada por lo que le gusta y por lo que aborrece la basca. Y otra, aprovechando esto, como la jerarquía establece una ética coercitiva para que seas un buen chico y no un cabroncete, según el código establecido.

Lo que me parece que pasa es que parte de lo que existe ha llegado a tener una forma en concreto, por ejemplo de lechuga, y luego de ensalada. Y parte irá a formar parte de alguien que come ensalada y parte se transformará en caca, de la que parte formará parte, a su vez, de otra lechuga o de un tomate. Y el que se comió la ensalada palmará alguna vez y será pasto de moscas y de malvas. A estas se las comerán las cabras, que pasará, en parte a ser leche, y parte queso, que formará parte de alguien que le gusta el queso.

¡Pues eso es Shiva! ¿Vas a decir que no es verdad? Shiva es eso sacralizado, destacado, resaltado, subrayado ¿Es que no está bien subrayar eso?

Y nuestro jardín, modesto jardín, tiene una fuente dedicada a Shiva (como dije en el postque sale cliqueando el asterisco rojo *) para que de ese modo más que un jardín sea un paraíso. Porque, aunque Anäis discrepe, creo que un jardín se diferencia de un paraíso en que en los jardines no hay dioses y en los paraísos sí. Dios se dice de muchas formas: Dios, Alá, Jehová, Brahma, Shiva, etc. Y a mí Shiva es la que más me mola.

A mí las religiones monoteísta me van poco. Porque suelen ser unívocas, exclusivistas, excluyentes. Me gustan más las politeístas y más aún las ateas ¡que las hay! Y gordas, como el Budismo. Aunque en el fondo tienden a ser bastante monoteístas. La cristiana es menos monoteísta de lo que presume ¡es trinitaria! Y a judíos y musulmanes eso les parece politeísmo. Otra religión también trinitaria es el Induismo.

La trinidad hinduista está formada por Brahma que es el originario. Es un dios oscuro del que nada se sabe, por lo que nada se puede decir. Otro es Shiva que tiene fama de destructor, mientras que Visnú la tiene de constructor. Pero el caso es que se dice de Shiva que destruye y reconstruye. Verdaderamente es un dios rehabilitador ¡y eso mola!

En resumidas cuentas de Brahma se sabe poco, nadie sabe nada. De Shiva no es que sepa mucho, pero lo tengo claro. Y de Visnú, salvo que es azul como Shiva y que es buenazo, pues tampoco sé gran cosa y además no lo tengo nada claro.

El caso es que en el paraíso de casa, como digo más arriba, ya tenía la fuente de Shiva. Tenemos otra fuente azul que llamaba de Escher porque tenía tendencia a correr hacia atrás. He decidido dedicarla a Visnú y para Brahma acabo de hacer otra que he colocado en un lugar sombrío. Es una toba con muchos agujeros y arriba tiene uno pequeño por el que mana una corriente mínima que se va escurriendo por casi todos los agujeros.

El caso es que en las fuentes se mueve el agua transmitiéndole vida a los jardines y si son sagradas los covierten en paraísos, como he dicho. Y para remachar el clavo ahora tiene aquí fuentes la Trinidad completa. Porque de lo que estoy seguro es de que ¡siempre será mejor un paraíso, por canijo que sea, que un mero jardín!







4 comentarios:

Isa dijo...

Muchas gracias por la entrada, Saltés! Es un buen preludio para mis próximos días, que serán en una isla cuasidesierta, que a lo mejor resulta también ser cuasiparadisiaca.

Saltes dijo...

¡Será un paraiso germinal en el q la biología aún no se impuso a la geología!¡¡¡feliz estancia!!!

Ana dijo...

Ya tenemos el equilibrio induista, ¡menos mal! ¡Podemos hacer las abluciones en la piscina con la caída del sol! :-)

Saltes dijo...

Efectivamente, Ana, ya tenemos el equilibrio total porque alcanzamos el 3. Y el 3 es mucho 3, como comentaremos algún día.