Este curso ya está nadando (ver Ser y Nadar cliqueando en el asterisco rojo*)
Hace nada aún no nadaba, hace tan solo un par de semanas, los miércoles y los jueves, como dije en el post anterior, me dirigía antes de las 9 de la mañana al aula 008. Y estaba Gloria solamente o con algunos más; o no había llegado nadie todavía, y encendía las luces, abría la puerta de mi despacho etc.
Poco a poco iba llegando la gente. A y cuarto llegaban los modelos. Se desnudaban y se ponían a posar. Encendía los focos que los iluminaban y se ponían los alumnos a dibujar. Los rezagados iban llegando poco a poco más tarde que pronto. Pero al final de la primera hora ya estaba la clase abarrotada.
Nunca estaban los sesenta pero siempre había muchísimos, algunos más de los precisos para dibujar cómodamente. Yo iba de caballete en caballete corrigiendo y orientando al personal.
Entre clase y clase, salvo el segundo intervalo que lo empleaba en la segunda ingesta del día, y al final de la clase corregía y calificaba los dibujos anteriores. Se ponía el despacho de bote en bote. Con el suelo alfombrado de dibujos y muchos tableros con más dibujos apoyados en la planeras. Y yo iba corrigiendo y calificando cada uno de ellos.
Algunos han aprendido muchísimo, otros poco, y otros nada. Es que eso es como un restaurante de “buffet”. Que se paga a la entrada, y hay quien se pone ciego de comer, mientras que otros no prueban bocado. Y para algunos si te he visto no me acuerdo, mientras que con otros se hace amistad para toda la vida. Y para un tercer grupo ni una cosa ni la otra.
Toda esa muchedumbre activa se disolvió en la nada.
Ahora cuando voy por los mismos sitios y a las mismas horas, puede que vea a uno, o a dos estudiantes ¡hola Tomás! ¡Que tal? ¿Os queda mucho?...
No creáis que lo digo con nostalgia. No lo digo con nada. Pero es muy llamativo que la realidad más evidente se la traga la nada en poco tiempo. Todas esas personas están en algún sitio. Pero esa colectividad ya no existe.
Hay un ejercicio de clase que siempre proponía pero que nunca hacían. Y este año, no sé por qué, lo han hecho. Son dibujos de los alumnos de esa clase hechos por ellos mismos. Y al final se ha conseguido tenerlos todos menos uno, el de una de las dos Marinas de clase, que desapareció a última hora.
Están reunidos en un volumen que tiene el título, un poco cursi, de “IMÁDENES PARA EL RECUERDO”. Es una curiosa edición de no se sabe cuántos ejemplares. Tantos como salgan de la copistería donde está el archivo. Es un libro curioso que tiene sentido tan sólo para el pequeño universo de curso en cuestión. Eso me lleva a pensar que los libros se hacen por lo general como la ropa de confección, a mogollón, y no a medida.
Ese es un libro a medida que pretende inútilmente enfrentarse a Cronos.
8 comentarios:
Mis mejores deseos para la nueva etapa, que seguro que puede estar tan bien como la anterior. Y también felicidades por la anterior porque ha concluido con éxito, que es lo mejor que puede suceder.
Muchas gracias Isa.
La nueva etapa es dura porq ya no pasa lo q decía Marcel Duchamp: "el arte es lo q dicen los artistas q es arte"
Sino lo q dicen los intermediarios q es arte. Y como eso no es arte ¡ahí la hemos jodido!
Por otra parte la etapa anterior ¡ha discurrido impecablermente en su totalidad!
Una vez en un bar conocí a una chica que estudiaba Bellas Artes y aunque no había dado clase contigo sabía quien eras porque al parecer, tienes una fama estupenda entre los alunmos! feliz nueva etapa!
Si, Edu, me llevo bien con los clientes. Lo q ocurre es q ya no voy a tener más.
¿Q D tenerlos me levaría bien con ellos? Es 1 futurible. Una posibilidad q no se va a dar nunca.
¿Y eso me inquieta? Pues no. Porq es q no tendría sentido.
Oye, que podemos hacer unos talleres este verano, que clientes tienes muchos!!!
Pero es que en realidad no es que tengas que empezar una nueva etapa, sino continuar con tu auténtico curro que tienes medio abandonado... Lo que tienes que hacer es pintarrrr!!!!!! que para eso eres pintorrrrr!!!!!
:-)
Pues Ana, llevas toda la razón. Pero el tema es el q como dijo en una conferencia sobre el automóvil el procurador Márquez, creo q se llamaba,en el Instituto La Rábida de Huelva, hace más de medio siglo, y es algo q he recordado duranT toda mi vida:
"Para q un automóvil ande, además de muchos condicionantes propios del automóvil, como tener ruedas, motor etc., es preciso q también haya condicionantes ajenos al mismo. Como es q haya carretera, o calle, o calzada.
Y de no haberla la tiene que llevar el propio automóvil. Es el caso de los tanques y otros vehículos de oruga"
Pues ahí está el detalle. Q como pintor estoy perfectamente el forma. Pero los condicionantes externos los tengo muy descuidados.
Y así como pintar se me da bien, eso otro se me da de pena.
muchas muchas felicidades por esa jubilación (muy anticipada según tus cálculos) y ya nos sorprenderás con otras actividades.
Un beso para el joven jubilado
Ángela
¡Gracias Ángela! Pero no me jubilo. Suelto lastre.
BSS
Publicar un comentario